Las burbujas en techos y paredes se produce por falta de
adherencia entre la pintura y el soporte en cuestión y se puede producir tanto
en exteriores como de interiores.
A continuación se describen las principales causas que
originan este tipo de patología en el revestimientos de paredes y techos.
Burbujas en el paramento interior:
· -Superficie húmeda o mojada, cuando la
superficie está mojada se perderá la adhesión entre ésta y la pintura.
· -Humedad en el interior de la habitación o
condensación de ésta en una alta concentración, también impedirá la correcta
adhesión de la pintura.
· -Absorción de humedad hacia la vivienda a través
de las paredes exteriores, principalmente un problema con las pinturas a base
de aceite.
· -Exposición de las bases de látex a una elevada
humedad poco tiempo después del secado de la pintura.
· -Otros problemas de humedad que afecten al tabique, tales como pequeños escapes de tuberías o pequeñas filtraciones en el
techo, revestimientos, ventanas, etc.
· - mezcla de diferentes tipos de
pinturas.
Burbujas en el paramento exterior:
· -Humedad por capilaridad que se manifiesta en el
abombamiento y posterior caída de la pintura. Se produce cuando el agua
asciende a través de los poros desde la cimentación o en contacto con el
terreno. Suele producirse en edificios antiguos que carecen de barrera física,
o está dañada.
· -Exposición a la humedad, ya sea proveniente del
rocío, la lluvia, etc, por filtración, condensación, principalmente un problema
de las pinturas de látex.
En el CTE DB_HS nos da los grados de impermeabilización
mínimo que deben tener las fachadas según la zona pluviométrica, la zona eólica
y el grado de exposición al viento del edificio, así como las pautas que debe
cumplir esta con los diferentes encuentros (cimentación, forjado, etc) y las condiciones
constructivas a cumplir.
· -Aplicación de pintura sobre una superficie caliente
bajo la luz solar directa, la pintura se secará demasiado rápido y atrapará los
vapores de la pintura bajo la película formada.
Un muro afectado internamente por la humedad
pierde entre un 30% y un 50% de su capacidad aislante respecto al mismo muro
pero seco, aumenta la proliferación de hongos y mohos proporcionando un ambiente
poco saludable en el interior del recinto.
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